El único lugar donde aparece la frase “culto racional” en
toda la Biblia es Romanos 12:1. La Biblia dice: Así que, hermanos,
os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos
en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto
racional.
Por las misericordias que Dios ha manifestado hacia el
pecador, las cuales han sido ampliamente descritas y explicadas en los
capítulos 1 a 11 de la epístola de Pablo a los Romanos, el autor ruega a los
creyentes que presenten voluntariamente sus cuerpos en sacrificio a Dios. El
cuerpo tiene relevancia en la medida que la persona esté viva. Cuanto la
persona muere, el cuerpo se reduce a mera materia en descomposición, de modo
que cuando Pablo habla del cuerpo se refiere a todo el ser del creyente.
Espíritu, alma y cuerpo. Pablo dice que debemos presentar nuestra vida en
sacrificio. Pero debe ser un sacrificio que cumple con tres requisitos.
Primero, debe ser un
sacrificio vivo. Esto significa una negación consciente y constante de nuestros
propios intereses, poniendo por encima los intereses de Dios. Es la rendición
total y absoluta de la vida del creyente a la voluntad de Dios. Esto es un
sacrificio vivo.
Segundo, el
sacrificio también debe ser santo. Esto significa que el creyente no debe tener
sus anhelos divididos, unas veces haciendo su propia voluntad y otras veces
haciendo la voluntad de Dios. Santo significa totalmente separado para Dios en
todo momento y en toda circunstancia.
Tercero, el
sacrificio debe ser también agradable a Dios. Esto significa que trae
satisfacción a Dios por el cumplimiento de su voluntad en nuestra vida.
Es en estas circunstancias que aparece la frase “vuestro
culto racional” la cual es materia de su consulta. Pablo dice entonces que
presentar a Dios nuestra vida como un sacrificio, vivo, santo y agradable es
nuestro culto racional. La palabra que se ha traducido como “culto” es la
traducción de la palabra griega “latreía” que significa el servicio a Dios.
Es la palabra que se usaba para referirse a la obra que hacían los sacerdotes y
levitas en el templo de Jerusalén.
La palabra que se ha traducido como “racional”
proviene de la palabra griega “logicós” de la cual viene nuestra palabra “lógico”.
Algo lógico es algo racional, algo consecuente, algo bien sustentado y
razonado. La frase culto racional, entonces denota que a la luz de toda la
riqueza espiritual que el creyente tiene a su entera disposición, no porque lo
merezca sino por la sola misericordia de Dios, la respuesta lógica, racional,
consecuente, es que el creyente rinda a Dios un servicio o un culto de orden
superior al servicio o al culto que realizaban los sacerdote y levitas en el
templo de Jerusalén.
Lo sacerdotes en
el templo de Jerusalén ofrecía a Dios cuerpos de animales muertos, los
creyentes debemos ofrecernos nosotros mismos a Dios como sacrificio vivo.
Es una entrega total y sin reservas a hacer la voluntad de Dios en todo
tiempo y en todo sentido.