“CONSAGRAME TODO PRIMOGÉNITO”, v. 1
Éxodo
13. 1-16. Leer.
Jehová
Dios tenía un derecho legítimo sobre el primogénito de Israel, por esta razón.
Al dar instrucciones para la noche de la Pascua y la salvación de su pueblo, declaró
explícitamente: “Pues yo pasaré aquella noche por la tierra de Egipto, y heriré
a todo primogénito en la tierra de Egipto, así de los hombres como de las
bestias; y ejecutaré mis juicios en todos los dioses de Egipto. Yo Jehová. Y la sangre os será por señal en las casas
donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en
vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto. ''. , Éxodo.
12.12-13.
Cuando
murió el primogénito de Egipto, el primogénito de Israel fue preservado por la
sangre del cordero, y Aquel que había ordenado todo ahora tenía derecho al
primogénito de Israel. Eran suyos.
Santificar
significa “apartar, separar, consagrar”, especialmente para un uso sagrado.
Como un recordatorio de esta preservación del primogénito de Israel cuando
pereció el primogénito de los egipcios, todos los primogénitos varones del
hombre y de la bestia debían ser consagrados al Señor. Todos los hijos varones
fueron redimidos.
El
primogénito de las bestias inmundas, como el asno, debía ser redimido o matado,
mientras que el primogénito de las bestias limpias debía ser ofrecido en
sacrificio, y cuando ciertas partes específicas habían sido quemadas, lo que
quedaba pertenecía a los sacerdotes.
En
los días venideros, los niños harían preguntas sobre la santificación del
primogénito y esto estaba previsto; " Y cuando mañana te pregunte tu hijo,
diciendo: ¿Qué es esto?, le dirás: Jehová nos sacó con mano fuerte de Egipto,
de casa de servidumbre;
15 y endureciéndose Faraón para no dejarnos ir, Jehová hizo morir en la tierra
de Egipto a todo primogénito, desde el primogénito humano hasta el primogénito
de la bestia; y por esta causa yo sacrifico para Jehová todo primogénito macho,
y redimo al primogénito de mis hijos”’, v. 14-15.
A
los creyentes se les llama " la congregación de los primogénitos ",
Heb. 12. 23. Hemos sido redimidos y pertenecemos a nuestro Redentor. "habéis
sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en
vuestro espíritu, los cuales son de Dios", 1 Cor. 6. 20.
Precious
Seed. Traducido.
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