No hurtarás”, v.15
Éxodo
20. 15; Efesios 4, 28; Tito 2. 9-15. Leer.
En
la primera parte de nuestra Biblia, el crimen de robar no parece ser tan
frecuente como otros pecados. Labán defraudó a Jacob en el libro del Génesis, y
los hijos de Israel fueron explotados en el libro del Éxodo, pero los
incidentes de robo flagrante son pocos y distantes entre sí. Sin embargo, a la
luz de la naturaleza adquisitiva del hombre, este octavo mandamiento prohíbe la
incautación deshonesta de la propiedad ajena.
Nunca
se anticiparía que un creyente en el Señor Jesús sería un ladrón o un
estafador, porque los ladrones están entre los que 'no heredarán el reino de
Dios', (1 Cor. 6. 9-10). Sin embargo, el peligro de la deshonestidad está
siempre presente, en la epístola a los Efesios, Pablo dice: " El que
hurtaba, no hurte más", 4. 28. Según este versículo, la ética del trabajo
cristiano debe reemplazar la inclinación a obtener ganancias fáciles por medios
deshonrosos. Debemos sustituir el impulso de adquirir cosas por nuestro placer
personal por el deseo de trabajar duro para tener recursos que satisfagan las
necesidades de los demás. La salvación transformó al mentiroso y engañador
Zaqueo en un filántropo, (Lucas 19)
Un
área donde prevalece la deshonestidad es el campo del empleo. Pablo le dice a
Tito que instruya a los siervos que no “defraudando, sino mostrándose fieles en
todo”, (Tito 2.10). En una fábrica, tienda o almacén, los bienes o materias
primas vendibles del empleador están en riesgo. En una oficina, se hace un mal
uso de su material de oficina, teléfono o material de oficina. Existe una
mentalidad que considera ciertas cosas como ventajas legítimas. La actitud de
un creyente debe ser diferente y la propiedad del empleador nunca debe usarse
sin permiso o recompensando de alguna manera. En todos los comercios e
industrias, también existe la tendencia a robar el tiempo de la empresa.
¡Otra
víctima de la deshonestidad es el recaudador de impuestos! Todo gobierno actúa
como un agente de Dios en el mantenimiento de la ley y el orden, por lo que los
creyentes tienen el deber de brindar apoyo financiero mediante el pago de
impuestos, (Rom. 13. 1-7. El pago fiscal es legal, la evasión fiscal es ilegal,
Dios dice: "no hurtarás".
Precious
Seed. Traducido.
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